Te diré que nunca es demasiado tarde o, en mi caso, demasiado temprano, para ser quien quieras ser. No hay límite de tiempo, empieza cuando quieras. Puedes cambiar o quedarte ahí. No hay reglas para esto. Podemos aprovechar el tiempo o desperdiciarlo; espero que lo aproveches.
Espero que veas cosas que te asombren. Espero que sientas cosas que nunca antes habías sentido. Espero que conozcas gente con otros puntos de vista. Que vivas una vida de la que estés orgullosa. Y si descubres que no lo estás, espero que tengas la fortaleza para empezar de nuevo.
-El curioso caso de Benjamin Button-
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